A la Opinión Pública:
Soy un ciudadano mexicano y chiapaneco y me he desempeñado en el ámbito público desde 1980.
Me enorgullece decir que gracias al apoyo de la población obtuvimos la presidencia municipal de Tapachula, Chiapas; la Diputación Federal y Local, así como la representación de mi estado en el Senado de República.
En el 2006 contendí por la gubernatura de Chiapas como candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Alianza por Chiapas.
En esas elecciones resultó ganador Juan Sabines Guerrero, por un margen de 0.5 % de diferencia. En gran medida, ese triunfo lo alcanzó gracias al apoyo del entonces gobernador Pablo Salazar Mendiguchía, quien con ello creía asegurar su impunidad gracias a su sucesor.
Desde aquella fecha no he tenido trato alguno con el señor Pablo Salazar, ahora preso luego de haber sido acusado de varios delitos por el gobernador Juan Sabines Guerrero.
Ante mi derrota electoral, y la determinación del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, decidí no realizar ningún acto fuera de la ley que alterara la paz de la población de Chiapas.
Con el apoyo de mi familia decidí retirarme de la actividad pública y acepté la invitación del Despacho Álvarez Puga y Asociados para integrarme como Director General de la empresa.
En diciembre del año pasado, el actual gobernador Sabines Guerrero me invitó a conversar acerca de distintos temas del Estado. En esa reunión le expresé mis deseos para contender por la gubernatura como candidato de mi partido (PRI).
Posterior a ese encuentro, la reacción de Juan Sabines ha consistido en amenazar a distintos integrantes del despacho Álvarez Puga, en inventarles cargos, en hacer una campaña negra contra mi persona, acusándome de cargos inexistentes, todo por el único “delito” de aspirar a ser gobernador de Chiapas.
Implicó tanto a un servidor como a la empresa Álvarez Puga y Asociados, cuando el periodista Jacobo Elnecavé fue golpeado en un pleito de cantina. Además, hace tres días acusó a la misma empresa de evadir una estratosférica cantidad por concepto de impuestos.
La Procuraduría General de Justicia del Estado de Chiapas nunca me ha citado para aclarar las falsas acusaciones y mentiras que se me han imputado, violentando las más elementales condiciones de defensa que la ley otorga, por lo cual he decidido defender a toda costa mi inocencia.
Por otra parte, en su afán de gobernar bajo un régimen totalitario, ha silenciado a la prensa de Chiapas porque no quiere que se conozca el grado de endeudamiento del estado, la falta de pago a acreedores, los nulos avances y muchos retrocesos que sufre el Estado desde que Juan Sabines asumió el poder.
No entiendo su temor por mi participación en el proceso electoral, pues aunque en las encuestas cuento con el apoyo de la mayor parte de la población, estos procesos son parte de la actividad política de cualquier entidad.
Juan Sabines simula apoyos a Enrique Peña Nieto y a Andrés Manuel López Obrador, además de garantizarle los votos de Chiapas al Partido Acción Nacional, lo cual lo ha encerrado en un callejón sin salida, por lo que en su desesperación arremete contra todo aquel que le contradiga, lo cuestione o simplemente piense por su cuenta.
En Chiapas se vive un régimen de terror del todo inaceptable en los tiempos actuales. Ha ordenado a los jueces librar órdenes de aprehensión contra muchas personas. Varias de esas órdenes son en mi contra, sin fundamento, solamente para impedirme participar en el proceso electoral que se avecina.
A pesar de haber suprimido demagógicamente la figura del arraigo, haciendo creer al pueblo de Chiapas que se viviría en un estado de derecho, la verdad es que ni con su nueva Constitución y sus modificaciones, se respetan los derechos fundamentales de los chiapanecos.
Por lo anteriormente expuesto y por muchas otras razones que el pueblo de Chiapas conoce pero calla por el terror que se vive, hago saber, como ciudadano chiapaneco, que no estoy dispuesto a que se avasallen mis derechos y garantías constitucionales, así como mi derecho político porque, en el ámbito de mi partido defenderé mi legítima aspiración a participar en un proceso electoral, con la plena conciencia y responsabilidad ante el presente y el futuro de Chiapas.
Junto a la población de Chiapas caminaré en construir una nueva alternativa de gobierno que lleve a la paz social, a la generación de empleo, a detonar la inversión y a garantizar la seguridad y el pleno respeto de los derechos que tenemos todos los habitantes de nuestro estado.
Atentamente.
José Antonio Aguilar Bodegas.
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